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Comarca de Liebana

La comarca de Liébana se ubica en el extremo occidental de Cantabria, limitando con las provincias vecinas de Asturias, León y Palencia. Se trata de un profundo valle recorrido por el río Deva y sus afluentes, y rodeado por todas partes por elevadísimas montañas, que superan casi siempre los 2.000 metros de altitud: la Cordillera Cantábrica que incluye los Picos de Europa y la sierra de Peña Sagra.

La salida natural del valle es el angosto de desfiladero de la Hermida, impresionante garganta de 20 kilómetros excavada en las calizas de los Picos de Europa por el Deva, que entrega sus aguas al Mar Cantábrico en Unquera, a 40 kilómetros de Potes. Cuatro valles principales integran la comarca de Liébana: Valdebaró (municipio de Camaleño), recorrido por el río Deva desde su nacimiento en Fuente Dé; el valle de Cereceda (Vega de Liébana), formado por el río Quiviesa y atravesado por la carretera del Puerto de San Glorio; Valdeprado (Pesaguero y Cabezón de Liébana), recorrido por el río Buyón y la carretera del Puerto de pie2drasluengas; y el valle de Cillorigo

Parque Natural de los Picos de Europa

Cantabria tiene en el Parque Nacional de los Picos de Europa la culminación de su accidentada y bellísima orografía, con cimas superiores a los 2.600 metros de altitud, y la singularidad de estas cumbres distan de la costa cantábrica en línea recta tan sólo 25 kilómetros.

El parque nacional engloba la práctica totalidad de los Picos de Europa, unos 700 kilómetros cuadrados que se reparten entre Cantabria, Asturias y Castilla y León, y que son el sector más agreste de toda la Cordillera Cantábrica.

Se trata de un inmenso macizo calizo, levantado bruscamente sobre los valles circundantes durante el plegamiento alpino y modelado por los glaciales cuaternarios y otros agentes erosivos, hasta resultar su configuración actual.

Los ríos Deva, Duje, Cares y Sella atraviesan las inmensas masas calizas de los Picos de Europa por impresio_nantes gargantas y los compartimentan en tres macizos bien diferenciados oriental, central y occidental.

El macizo oriental de los Picos, también llamado macizo de Ándara, y situado entre los ríos Deva y Duje, pertenece casi íntegramente a Cantabria, salvo un pequeño sector asturianos. Este macizo se levanta bruscamente sobre el valle de Liébana, siendo sus cumbres más relevantes La Morra de Lechugales (2.441), Silla Caballo (2.438), Pico cortés (2.370), Samelar (2.227), Pico del Sagrado Corazón (2.212), etc. Debido a su altitud, ligeramente menor que la de otros, es el macizo menos visitado y conocido, lo cual no deja de ser un aliciente para su visita.

El macizo central, también denominado de los Urrieles, se reparte entre Cantabria, Asturias y León, y es el que reúne las cumbres más elevadas: Torrecerredo (2.648), Llambrión (2.642), Peña Vieja (2.613), pico Tesorero (2.570), o el escarpado y legendario Naranjo de Bulnes (2.519).

El macizo occidental o del Cornión, situado en territorio asturiano o leonés, se ubica más allá de la celebre garganta del Cares, que lo separa del macizo central y culmina en la peña Santa de Castilla(2.596). No es fácil resumir el patrimonio natural y cultural que atesora el Parque Natural de los Picos de Europa.

Desde un punto de vista geomorfologico, los Picos tienen revelencia mundial por sus incomparables desfiladeros, sus formas glaciares y sobre todo su modelado Karstico, con varias de las simas más profundas del mundo. En su vegetación destacan varias muestras de bosque Atlántico -hayedos y robledales sobre todo, que coexisten con los encinares y alcornocales mediterráneos que dominan el fondo del Valle de Liébana y en las zonas altas de los Picos, donde ya no es posible la presencia del bosque, una flora de alta montaña de gran interés botánico.

En cuanto a la fauna, el Parque Nacional y sus aledaños son uno de los últimos refugios de algunas especies amenazadas de extinción en Europa occidental: oso pardo, urogallo o águila real, siendo abundantes otras: rebeco, ciervo. Corzo, jabalí, lobo, buitre...Completan el paisaje de la zona los hermosos y acogedores pueblos que existen al pie2 de los riscos, con interesantes muestra de arquitectura popular, entre las que se encuentran los últimos hórreos de Cantabria.