Historia - Ver - Rutas - Sitios - Dormir - Comer

Santo Toribio

Monasterio fundado posiblemente en torno al del siglo VI, no es hasta el siglo IX cuando alcanza su actual denominación y notoriedad.

En su interior alberga el "Lígnum Crucis" (el mayor trozo conservado de la Cruz de Cristo) en la capilla construida al efecto en el siglo XVIII y cuya reliquia puede contemplarse.

Aquí vivió en el siglo VIII el Beato de Liébana, presbítero y monje y monje célebre por sus "Comentarios del Apocalipsis", obra cumbre del miniaturismo medieval, con ilustraciones llenas de expresividad y colorido.

La iglesia actual se construyó en el siglo XIII, siendo restaurada en el siglo XVII.

Su magnífico entorno en el monte Viorna, con varias ermitas en los alrededores (frente a los imponentes Picos de Europa), permiten inundar de espiritualidad nuestro ánimo. Santo Toribio mantiene junto a Roma, Jerusalén, y Santiago de Compostela el privilegio del Año Santo.

Lebeña

El final del desfiladero nos lleva hasta Lebeña, cuya iglesia, algo apartada del pueblo, constituye el mejor ejemplo de arquitectura mozárabe de Cantabria. Rodeada de un entorno privilegiado, fue edificada en el siglo X, si bien la torre y el pórtico son añadidos posteriores. Junto a ella, un tejo milenario (árbol mítico en Cantabria) y un olivo, agregan simbolismo allugar. El primero, por su elevada toxicidad (todas sus partes son tóxicas salvo el fruto), servía para la protección del templo. Según Estrabón, su veneno era ingerido por los Cántabros antes que rendirse al enemigo; el otro árbol, el olivo, representa la riqueza. En Lebeña se fabrica un apreciable queso artesano.

Fuente De

Fuente Dé es el lugar donde termina la carretera y donde las paredes calizas de los Picos nos obligan a parar. Aquí es recomendable coger el teleférico y, después de cuatro minutos de vertiginosa ascensión , contemplar desde el mirador de El Cable (a casi 2.000 m. De altitud) la majestuosidad de la Cordillera Cantabrica.