Capital del municipio de Peñarrubia, uno de los más desconocidos pero también uno de los más atractivos e
inalterados. Enclavado en zona montañosa y rodeado de moles calizas por todos lados, sus laderas siempre verdes
y aterrazadas proporcionan espléndidos paisajes con exuberante vegetación. El municipio de Peñarrubia nos ofrece
un hermoso conjunto de torres medievales defensivas entre la que destaca la de Linares, de planta cuadrada con
restos de almenas y cubierta en parte de hiedra.
Lebeña
El final del desfiladero nos lleva hasta Lebeña, cuya iglesia, algo apartada del pueblo, constituye el mejor
ejemplo de arquitectura mozárabe de Cantabria. Rodeada de un entorno privilegiado, fue edificada en el siglo X,
si bien la torre y el pórtico son añadidos posteriores. Junto a ella, un tejo milenario (árbol mítico en Cantabria)
y un olivo, agregan simbolismo allugar. El primero, por su elevada toxicidad (todas sus partes son tóxicas salvo
el fruto), servía para la protección del templo. Según Estrabón, su veneno era ingerido por los Cántabros antes
que rendirse al enemigo; el otro árbol, el olivo, representa la riqueza. En Lebeña se fabrica un apreciable queso
artesano.
Finalmente, el Campoo, cuyos amplios prados se divisan desde el mirador de la Palombera, es una zona perteneciente
a la cuenca del Ebro, con una altitud media de 800 metros.
Piasca
En esta localidad se levanta la iglesia de Santa María, una de las mejores muestras del románico de la región.
Fue construida en el siglo XII sobre un antiguo monasterio del siglo IX. Desde Piasca podemos contemplar en días
claros impresionantes panorámicas de los Picos de Europa.
Potes
Capital del pequeño municipio del mismo nombre, está geográficamente ubicada en el centro de la comarca de
Liébana: en él confluyen los ríos Deva y Quiviesa y los cuatro valles lebaniegos. Potes es la villa de los
puentes (pontes) y de las torres; destacando la del Infantado (actual Ayuntamiento) y la de Orejón de la Lama,
ambas del siglo XV. El conjunto de barrios de la parte antigua conserva un gran sabor popular y mucho encanto;
sus callejuelas y caserones (la mayoría con blasones) ayudan al visitante a imaginar tiempos liebanaados repletos
de historia. En Potes se celebra todos los lunes del año el día del mercado, momento oportuno para adquirir
los afamados productos de la comarca: quesos, orujo, embutidos, miel, garbanzos...
Santo Toribio
Monasterio fundado posiblemente en torno al del siglo VI, no es hasta el siglo IX cuando alcanza su actual
denominación y notoriedad. En su interior alberga el "Lígnum Crucis" (el mayor trozo conservado de la Cruz
de Cristo) en la capilla construida al efecto en el siglo XVIII y cuya reliquia puede contemplarse. Aquí
vivió en el siglo VIII el Beato de Liébana, presbítero y monje y monje célebre por sus "Comentarios del
Apocalipsis", obra cumbre del miniaturismo medieval, con ilustraciones llenas de expresividad y colorido.
La iglesia actual se construyó en el siglo XIII, siendo restaurada en el siglo XVII. Su magnífico entorno
en el monte Viorna, con varias ermitas en los alrededores (frente a los imponentes Picos de Europa),
permiten inundar de espiritualidad nuestro ánimo. Santo Toribio mantiene junto a Roma, Jerusalén, y Santiago
de Compostela el privilegio del Año Santo.
Argüebanes
Lugar del municipio de Camaleño, la musicalidad de su toponimia parece fundirse con el eco de las montañas que
le rodean. Como casi todos los pueblos lebaniegos conserva una interesante arquitectura popular que aquí se
aprieta contra las laderas del macizo oriental de los Picos.
Mogrovejo
Es la aldea lebaniega por excelencia. Su fotogénia y espectacular ubicación rodeada permanentemente por las
cumbres nevadas de los Picos de Europa, con su peculiar torre medieval dibujada contra el fondo, ofrece una
visión tan poco frecuente como difícil de olvidar
Cosgaya
Pequeña localidad de Camaleño, acompañada en su trazado viario por el río Deva, que a su liebanao deja una rica
vega. Personajes históricos nacieron y murieron aquí: los señores de Liébana, Don Pelayo y su hijo Favila,
este úlltimo devorado por un oso en las cercanías del pueblo...Es Cosgaya lugar de casa nobles y de casas
escudadas, algunas acogen hoy instalaciones hoteleras con encanto.
Fuente De
Fuente Dé es el lugar donde termina la carretera y donde las paredes calizas de los Picos nos obligan a parar.
Aquí es recomendable coger el teleférico y, después de cuatro minutos de vertiginosa ascensión , contemplar
desde el mirador de El Cable (a casi 2.000 m. De altitud) la majestuosidad de la Cordillera Cantabrica.
Tresviso
Integrado en el Parque Nacional de Picos de Europa, merece la pena el esfuerzo de llegar hasta el recóndito
pueblo de Tresviso por la belleza de sus paisajes y por el rico queso picón con D.O. que elaboran artesanalmente
en la zona. La subida se realiza por un impresionante camino tallado en la parte del desfiladero que conduce
al balcón de Pilatos con una fantástica vista
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